No estás perdido, solo te estas haciendo mal la pregunta

Yo me hice mil veces esta pregunta.

👉 “¿Qué quiero hacer con mi vida?”

Y mientras más me la hacía…
más me bloqueaba.

Porque esa pregunta suena bonita.

Suena importante.

Hasta parece espiritual.

Pero también te llena de presión.

Porque ahora no solo tienes que tomar una decisión… tienes que tomar la correcta.

La que encaje con “tu propósito”.

Con tu esencia.
Con lo que viniste a hacer al mundo.

Y claro…
con esa carga encima, lo más normal es quedarse quieto.

A mí me pasó.

Hasta que un día me di cuenta de algo:

👉 No es que no sabía qué hacer con mi vida.
Es que me estaba haciendo la pregunta equivocada.

La pregunta que me ayudó a avanzar fue otra.

Fue esta:
👉 ¿Cómo puedo ser útil hoy con lo que ya sé hacer?

Y suena simple, lo sé.

Pero esa pregunta no te aplasta. Esa pregunta te mueve.

Te conecta con lo que ya tienes.

Con lo que ya viviste.
Con lo que ya sabes.

No con lo que “te falta descubrir”.

Y si hoy tú también estás sintiéndote medio perdido… si llevas semanas o meses esperando claridad.

Hazte esa pregunta.

Pero de verdad.

Sin adornos.
Sin querer que sea perfecta.

Solo siéntate y pregúntate:
👉 ¿A quién podría ayudar hoy… con lo que ya sé hacer?

Ahí puede que no esté tu propósito eterno.

Pero seguro está tu próximo paso.

Y eso ya es muchísimo.

Nos vemos mañana,

—
Andry de

PD: No tienes que tener todo resuelto para empezar, solo necesitas una pista, una intención, una dirección. Y muchas veces… esa dirección ya está dentro de ti, solo que te la estás preguntando mal.